Brigadistas del norte santafesino contribuyeron en el control de incendios en la Patagonia

Se trata de un grupo de bomberos entrenados que integraron la comitiva provincial de asistencia ante el pedido del ministro del Interior. Entre ellos, el Jefe de Bomberos Voluntarios de Reconquista, Cte. Mayor César Romano, 2 bomberos de Romang y 5 zapadores de Vera.

Los incendios de principios de mes en el Parque Nacional Los Alerces y alrededores encendieron las alarmas de la Coordinación Única de Operaciones (CUO), encargada de activar la movilización ordenada y sistemática del Sistema Nacional de Bomberos Voluntarios. Desde allí fue notificada la Federación Santafesina de Asociaciones de Bomberos Voluntarios, quienes seleccionaron una delegación de brigadistas de la provincia de Santa Fe, la cual viajó el jueves 8 de febrero a Chubut para sumarse a los bomberos que desde hacía días trabajaban combatiendo los incendios forestales en la zona.

Dicho equipo estuvo conformado por 45 especialistas de la Brigada Forestal de la provincia, integrada por Bomberos Zapadores, Bomberos Voluntarios, personal de la Secretaría de Protección Civil Forestal, paramédicos y especialistas en comunicaciones, quienes ese mismo jueves viajaron en un avión Hércules de la Fuerza Aérea.

Entre los convocados se destaca la presencia del Comandante Mayor César Romano, jefe del cuartel de Bomberos Voluntarios de Reconquista, quien junto a Nicolás Cravero y Leandro Maciel de Romang y los zapadores de Vera Diego Cuatrín, Emilio Bastias, Mario Dubin, Mauro Mathey, y Lorenzo Burgos Azerrad, manifestaron su orgullo por formar parte de una de las mejores Brigadas Forestales del país y aportar su grano de arena para buscar soluciones en tiempos muy apremiantes, y permaneciendo por 10 días combatiendo las llamas.

El Cte. Mayor César Romano junto a Cravero y Maciel, dentro del Hércules rumbo a Esquel. Créditos: Bomberos Voluntarios de Romang.

En declaraciones a los medios de prensa, César Romano detalló que “del sistema de Bomberos Voluntarios fuimos 15 brigadistas, más yo que iba a cargo. Además, iban 20 bomberos zapadores, y de la brigada de la provincia, que depende de Protección Civil, iban 10 muchachos. De Reconquista fui solo, convocado por la Jefatura Provincial de Bomberos, por la Federación Santafesina, a cargo de esa delegación”.

Sobre las particularidades del trabajo en tierras patagónicas, el Jefe de Bomberos de Reconquista expresó: “hicimos base en las inmediaciones de Esquel, cerca del Parque Nacional Los Alerces que fue donde se originó el fuego, aunque no estuvimos en el

Parque. Según lo que nos comentaban ahí, el incendio fue provocado, incluso hay una recompensa para quien pueda aportar información. Y lo de los Alerces es gravísimo porque son especies de la flora que tardan años en criarse… además de toda la fauna que se pierde, porque hay animales que están muy perjudicados. O el mismo clima. Es decir, estuvimos apagando incendios en un paisaje espectacular. Es un lugar espectacular, pero no con humo… con humo no se ve el paisaje, lamentablemente”.

Los 45 brigadistas que la Provincia envió a Esquel a colaborar en la contención del fuego originado en Los Alerces.

- ¿Cómo calificarías esta experiencia de trabajo en la Patagonia?

- Me fui con mucha expectativa por ver cómo iba a ser mi función en esta emergencia. Y me vuelvo muy contento en el sentido de que considero que estuve al nivel de lo que me pidieron que haga en ese momento. Siempre decimos, somos del norte de Santa Fe, de una provincia que tiene sus problemas, pero hoy vimos que tenemos la misma capacitación que el mejor brigadista forestal que hay en la nación. Nos mandaron a cubrir un sector que es cerca del Río Percy, donde teníamos 500 familias que estaban en riesgo y pudimos defender ese sector y controlarlo. Cuando nos volvimos, lo dejamos en guarda de cenizas. Logramos lo que necesitábamos hacer, y eso nos pone muy contentos los brigadistas de la provincia de Santa Fe.

- ¿En qué consistía su jornada laboral?

- Nos levantábamos a las 5 de la mañana, desayunábamos y partíamos hacia el lugar. Estábamos en Esquel, en el Ejército, y de ahí nos llevaban hasta un sector donde teníamos que trabajar, contra el Río Percy, y trabajamos todo el día. Los chicos veían que estaban cansados, que teníamos que dar recambio, pero no podíamos porque no teníamos gente. Seguíamos trabajando. También teníamos un doble riesgo, que fue la avispa “chaqueta amarilla”, que nos picaron a varios brigadistas y tuvimos que hacer evacuación inmediata. Pero en líneas generales todo el protocolo funcionó, así que estamos muy conformes.

- ¿Qué devolución tuvieron de la gente del lugar sobre su tarea?

- El clima y los paisajes son hermosos, como todos sabemos, pero la gente del lugar también. Tuvimos un impacto positivo porque la gente sabe que intentamos ayudar. Nos recibían con lo poco que tenían, incluso cuando llegamos a un sector del río nos aplaudían… fue muy agradecida la gente, y eso es lo que reconforta. Porque cuando un bombero entra a un lugar donde hay fuego y es un lugar desconocido, arriesga la vida. Era peligroso porque teníamos mucha variante en la topografía, y con canales de viento que acá no los tenemos. Allá los vientos rotaban, nos llegaban de espaldas, por eso siempre debíamos estar atentos con un vigía para ver cómo estaba el clima, el viento, o cuando en la montaña hay nubes es riesgoso por los rayos, etc. Pero pusimos todo de nosotros, como lo hacemos siempre. Sea en la ciudad de Reconquista o alrededores, y esta vez que nos tocó ir a otro lugar, con una topografía muy diferente, un clima diferente. Gracias a Dios lo hicimos muy bien y tuvimos reconocimiento hasta el mismo gobernador de Chubut.

Bajo control

En la actualidad, los incendios en la zona se encuentran bajo control, aunque se mantiene el despliegue de recursos.

La situación hoy está controlada, ya que la temperatura, la humedad y las condiciones del tiempo relacionadas con el viento han estado tranquilas; sin rastros de lluvias, pero estable. Lo que quedaba por hacer en el relevo era la guardia de cenizas, que es estar atento a cualquier posible foco, pero ya prácticamente no había posibilidad de re ignición. Igualmente, el personal local y del parque nacional siguen en alerta, informaron las autoridades.

En tanto, medios locales informan que el operativo incluyó el despliegue de más de 450 personas, con 300 brigadistas en la línea de fuego, así como también el soporte de medios aéreos, vehículos especiales, equipamiento, motobombas forestales, entre otros recursos, que permitieron controlar el siniestro y lograr una marcada caída de la actividad en el incendio.

“El incendio en el Parque Nacional Los Alerces en Chubut está totalmente controlado, luego de casi cuatro semanas de trabajo. Brigadistas realizan guardias de cenizas en un territorio que ronda las 7000 hectáreas afectadas”. Frase resaltada

Solicitud oficial

El gobernador Maximiliano Pullaro ordenó el 8 de febrero, el envío de una delegación de brigadistas de la provincia de Santa Fe a Esquel (provincia de Chubut) para combatir los incendios forestales. Fue el mismo mandatario quien estuvo en el aeropuerto para despedirlos.

La actividad se desarrolló en el Aeropuerto de Sauce Viejo donde el gobernador comentó: "el ministro del Interior de la Nación Guillermo Francos se comunicó conmigo para pedirnos apoyo, y decidimos colaborar con la provincia del sur. También estuve en comunicación con Ignacio Torres, el gobernador de Chubut, quien tomó con mucha satisfacción el aporte solidario que hacía la provincia de Santa Fe en este momento difícil que están viviendo, porque llevan muchos días de fuego, de incendio forestal que no están pudiendo controlar hasta el momento".

Respecto de la delegación, Pullaro destacaba: "nuestros brigadistas son personal con mucha capacitación, y esperamos tener una colaboración muy importante en los próximos días para ayudar a sofocar estos incendios".

Al mismo tiempo, el secretario de Protección Civil, Marcos Escajadillo, agregó que "cuando la emergencia toma una magnitud importante se necesita la asistencia, colaboración y solidaridad, pero sobre todo la comisión de equipos especializados en incendios forestales, porque no cualquier bombero puede ser brigadista forestal: se

reconoce a los incendios forestales como muy traicioneros, hay un desgaste físico muy significativo. Es por eso que todos los brigadistas viajaron con una ficha médica, con un seguro, y con todo el equipamiento, pero sobre todo con lo más importante, que es su capacitación y entrenamiento".