Actores, dirigentes de derechos humanos, políticos e intelectuales se solidarizan con Norman Briski

Tras los ataques por su discurso a favor de Gaza

Después de las agresiones que sufrió por el discurso en defensa del pueblo palestino en los Martín Fierro de cine, el actor recibió gran cantidad de apoyos. Entre ellos, de la Asociación Argentina de Actores y del Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel.

Después de que el actor Norman Briski recibiera una serie de ataques tras su discurso en defensa de los palestinos en la entrega de los Martín Fierro de cine, numerosos colectivos le manifestaron su solidaridad y se siguen juntando firmas para apoyarlo. Entre ellos, destaca un comunicado de sus compañeros de la Asociación Argentina de Actores.

Al subir al escenario a recibir el Martín Fierro a su trayectoria artística, Briski expresó su solidaridad con el pueblo palestino frente a los ataques de Israel y dijo: “Gaza jamás será vencido, no me importa que me aplaudan mucho o poco, pero lo siento aquí, en mi sangre, en mis ancestros. La defensa de un pueblo que está siendo asesinado, Gaza”.

Tras ello, fue blanco de incontables ataques y críticas en redes sociales y en medios de comunicación y hasta de intentos de judicializar sus palabras. La Asociación Argentina de Actores emitió un comunicado que señala: “Rechazamos los ataques que ha recibido el actor Norman Briski, víctima de una campaña de desprestigio por expresar sus ideas. Briski, compañero premiado por su enorme trayectoria artística, ha sido una voz libre y comprometida frente a distintas problemáticas”.

“La libertad de expresión es un derecho que no admite excepciones. No podemos permitir que la intimidación y la manipulación se utilicen para silenciar opiniones. Las diferencias, por más profundas que sean, deben coexistir en una sociedad que promueva el respeto y el debate”, añade el texto. “Los ataques desmedidos, que también sufren otros trabajadores y trabajadoras de la cultura por manifestar sus ideas, crean una espiral de violencia que busca callar voces, lo cual es inaceptable en una sociedad democrática. Estas agresiones frecuentes responden a una estrategia de disciplinamiento que intenta censurar y estigmatizar a quienes se atreven a opinar libremente”.

Norman Briski se jugó en los Martín Fierro.

Foto: Mariano Espinosa

“Defendemos la pluralidad de ideas y rechazamos cualquier forma de censura disfrazada de ataques organizados. La cultura no se calla, y seguiremos firmes en la defensa del derecho a expresarse sin miedo a represalias ni manipulaciones”, concluye.

Además, encabezada por el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, comenzó una campaña para reunir firmas en su apoyo. Artistas, dirigentes de derechos humanos, políticos e intelectuales expresaron su solidaridad con el actor, ante lo que consideran una «campaña de injurias del sionismo».

“Vale señalar que el breve discurso de Briski no solo fue aplaudido por gran parte del auditorio integrado por artistas y directores cinematográficos, sino que recogió numerosas adhesiones de ciudadanos y ciudadanas de nuestro pueblo que saben lo que significa el atroz genocidio con decenas de miles de asesinados en Palestina y Líbano”, señala ese texto.

“Sin embargo, también a partir de ese momento se puso en marcha una brutal campaña de linchamiento a través de los habituales trols de las redes y de las expresiones injuriosas y mentirosas de los voceros mediáticos e institucionales del sionismo en Argentina, acusando, paradójicamente, a quien tiene ascendencia judía como Norman Briski, de ‘antisemita’ y otras barbaridades por el estilo”, añade. “Frente a estas campañas repetidas y cuidadosamente orquestadas para censurar voces de protesta ante tanto horror que ocurre en Medio Oriente, los y las abajo firmantes, a manera individual o en nombre de organizaciones sociales, políticas y de Derechos Humanos, NOS SOLIDARIZAMOS con Norman Briski, quien a lo largo de toda su carrera artística siempre ha respaldado todas las manifestaciones populares, enfrentando al fascismo, al racismo y todas las expresiones autoritarias que de allí se derivan”.

“A la vez, REPUDIAMOS los ataques maliciosos y las amenazas de aquellos que se regodean no solo en querer acallar la verdad sino que ensalzan -incluso desde el Gobierno- la violencia en un grado de perversidad pocas veces vista desde la época del nazismo alemán, cuando avalan el genocidio contra el pueblo palestino”, finaliza.